viernes, 28 de marzo de 2014

Converge - When forever comes crashing



Admito que me iluminé con el ruido blanco de Jane Doe. Esa fue mi primera inmersión en el mundo Converge. Pero con el paso de los años, he logrado asimilar su, creo yo, un tanto desapercibido trabajo previo, que es el nos ocupa aquí: When Forever Comes Crashing.

Corría el año 98 y Converge aún no había despegado hacia ése relativo puesto en el mainstream de los circuitos extremos en el que a día de hoy se asientan de manera más sólida cada vez, con una ascensión que comenzaría con el antes citado Jane Doe, por ahora, obra que unifica a toda la crítica y fans.  Pero éste "When forever comes crashing" ejemplifica el paso de gigante que daría la banda para despuntar como una de las bandas de música extrema más respetadas de hoy en día.  Producido a dos bandos entre la propia banda y el líder de Today is the day, Steve Austin, auténtico gurú en esto de los sonidos extremos, fueron capaces de dar forma un trabajo fiero y áspero, y probablemente el más oscuro que hayan grabado. Y vamos, la mano del líder de TITD se deja más que notar. O al menos yo consigo  escuchar suficiente reminiscencias, aportando ese toque malsano a la contundencia hardcore de la banda, y colaborando con algunas voces marca de la casa. Porque por aquella Converge aún se sustentaban firmemente en las coordenadas del hardcore noventero. Rítmicas contundentes y riffs machacones repletos de groove, pero envueltos en una costra de virulencia que en éste disco Steve Austin supo explotar. La característica y agónica voz de Bannon, junto a los acordes disonantes y demás tretas guitarreras asesinas a cargo del dúo Ballou-Dalbec los convirtieron en estandartes de géneros hoy en día denominados como el “noise-core”. Aunque si esta ultima etiqueta tuvo alguna vez su razón de ser, sería mejor adjudicársela a su posterior obra: Jane Doe.

En definitiva, y vuelvo a repetir, probablemente uno de los discos más feroces y oscuros de Converge, y que quizás ha quedado un tanto sepultado por el resto de su notable discografía posterior. Al menos es mi percepción. Por supuesto tampoco es una experiencia de fácil digestión, incluso para los oídos más curtidos, y eso hablando de Converge, ya es mucho. Al menos a mí me costó su tiempo. Pero al final obtienes recompensa, y a día de hoy puedo decir que alberga un puñado de los mejores y más memorables riffs de todas sus grabaciones. Quizás la producción no es exactamente la que mereciese tener, a mi juicio. Y eso que tuvo su remasterización en el 2005 que mejoró algo el volumen. Pero la batería me sigue sonando como….demasiado rebotante. Pero en fin, nada grave.

A lo largo de 11 temas, Converge no dan tregua al oyente, con la contundencia de cortes como “My unsaid everything”, “Conduit” o el mismo “When forever comes crashing”, pero también saben internarse por  pasajes  asfixiantes y tensos como “In harms way” o  de carácter más sosegado en “10 cents” , aportando ese matiz de emotividad que a pesar de todo, les es inherente.

Aquí expongo este "When forever comes crashing", como piedra de toque para comenzar con uno de los básicos en esto de machacar pabellones auditivos.


-Título: When forever comes crashing
-Año: 1998 / remasterizado en 2005
-Sello: Equal Vision
-Productor: Steve Austin / Converge
-Miembros: 
 Jacob Bannon
 Kurt Ballou
 Aaron Dalbec
 Damon Bellorado
 Stephen Brodsky




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